La habían abandonado súbitamente
y no se podía explicar
le arrancaron el alma del cuerpo
y el dolor la ahoga sin piedad.
En llanto se sumergía
y no se podía contener
la trataban de consolar inútilmente
y aún no se explicaba el por qué.
Quería estar junto a ellos
hasta el final del día que tendrían
la despedida jamás soñada
entre nostalgias y muchas orquídeas.
Orquídeas que se marchitarían
al igual que el resto de su vida
estar sin ellos será el peor castigo
que tendrá en todo su existir.
Los tendrá siempre presentes
los amará sin descansar
aunque hayan pasado por su vida
como cual estrella fugaz.